La Colección Blaisten participó en la exposición
Homenaje 100 años sin Posada
 |
| En el podio |
 |
Asi se ve la exposición |
 |
Asistentes |
Recuerdan a Posada en el corazón de Tepito
Cultura •
23 Enero 2013 - 6:06am — Leticia Sánchez Medel
Se exhiben 17 imágenes de gran formato.
México • En la calle de Jesús Carranza, en la que José Guadalupe Posada creó La Catrina,
una de sus obras más reconocidas, y donde el 20 de enero de 1913 murió
en medio de la miseria, se le rindió este martes un homenaje con la
inauguración de la exposición 100 años sin Posada.
El Gobierno del Distrito Federal, a través de su Secretaría de Educación, recordó al prolífico grabador en la preparatoria que lleva su nombre en su honor.
Para evocar su memoria, en Jesús Carranza 33, en el corazón de Tepito, Mara Robles Villaseñor, secretaria de Educación, inauguró, junto con la autoridad del Centro Histórico, Alejandra Moreno Toscano, una exposición con 17 reproducciones de gran formato de la autoría del artista gráfico mexicano.
Correspondió a Armando Ramírez narrar las andanzas de Posada por estos rumbos, donde no solo vivió sino también trabajó: “Aquí, en la calle de Jesús Carranza, ‘chupó faros’ don Lupe. Cuenta la crónica que estaba chupando con dos cuates, porque traía una borrachera desde el 12 de diciembre; entonces, el pobrecito ahí bailó”.
Ramírez propuso que se organice un recorrido con “las andanzas de José Guadalupe Posada”, desde la calle de Academia, en el Centro Histórico, hasta Jesús Carranza, donde se localiza la vecindad donde falleció el 20 de enero de 1913.
Rafael Barajas, El Fisgón, no pudo acudir a la inauguración de la exposición, que fue curada con el apoyo de colección de Andrés Blaisten, así que envió un texto, ¿Conoce usted a Posada?, al que le dio lectura Inti Muñoz.
“Posada es uno de los artistas más celebrados de México; su trabajo es objeto de constantes homenajes, numerosas exposiciones y monografías, y sus geniales calaveras han sido reconocidas como un arquetipo nacional y universal. El culto a la obra y a la figura de Posada está tan arraigado desde hace décadas en la cultura de este país, que cuesta creer que el grabador fue menospreciado en su época. Durante su estancia en la Ciudad de México vive en una vecindad miserable; una parte importante de su material se pierde en el caos y en los basureros de talleres e imprentas. No se ha conservado ni uno solo de sus dibujos originales”.
Posada ahora es recordado como el gran artista del pueblo, luego que en los años 30, el artista francés, Jean Charlot lo rescatara de la penumbra.
La colección Blaisten
Robles Villaseñor también dijo que, dada la relevancia del acervo del coleccionista Andrés Blaisten —la cual ahora no tiene un foro donde mostrarse, luego de que la UNAM dejara de exhibirla en el Centro Universitario Tlatelolco—, el gobierno capitalino podría acogerla.
“Nada nos haría más felices que iniciar conversaciones con el señor Blaisten para ver la colección tenga un espacio en la ciudad, para nosotros sería un proyecto educativo y cultural. Tenemos interés y disposición para hacerlo”.
El Gobierno del Distrito Federal, a través de su Secretaría de Educación, recordó al prolífico grabador en la preparatoria que lleva su nombre en su honor.
Para evocar su memoria, en Jesús Carranza 33, en el corazón de Tepito, Mara Robles Villaseñor, secretaria de Educación, inauguró, junto con la autoridad del Centro Histórico, Alejandra Moreno Toscano, una exposición con 17 reproducciones de gran formato de la autoría del artista gráfico mexicano.
Correspondió a Armando Ramírez narrar las andanzas de Posada por estos rumbos, donde no solo vivió sino también trabajó: “Aquí, en la calle de Jesús Carranza, ‘chupó faros’ don Lupe. Cuenta la crónica que estaba chupando con dos cuates, porque traía una borrachera desde el 12 de diciembre; entonces, el pobrecito ahí bailó”.
Ramírez propuso que se organice un recorrido con “las andanzas de José Guadalupe Posada”, desde la calle de Academia, en el Centro Histórico, hasta Jesús Carranza, donde se localiza la vecindad donde falleció el 20 de enero de 1913.
Rafael Barajas, El Fisgón, no pudo acudir a la inauguración de la exposición, que fue curada con el apoyo de colección de Andrés Blaisten, así que envió un texto, ¿Conoce usted a Posada?, al que le dio lectura Inti Muñoz.
“Posada es uno de los artistas más celebrados de México; su trabajo es objeto de constantes homenajes, numerosas exposiciones y monografías, y sus geniales calaveras han sido reconocidas como un arquetipo nacional y universal. El culto a la obra y a la figura de Posada está tan arraigado desde hace décadas en la cultura de este país, que cuesta creer que el grabador fue menospreciado en su época. Durante su estancia en la Ciudad de México vive en una vecindad miserable; una parte importante de su material se pierde en el caos y en los basureros de talleres e imprentas. No se ha conservado ni uno solo de sus dibujos originales”.
Posada ahora es recordado como el gran artista del pueblo, luego que en los años 30, el artista francés, Jean Charlot lo rescatara de la penumbra.
La colección Blaisten
Robles Villaseñor también dijo que, dada la relevancia del acervo del coleccionista Andrés Blaisten —la cual ahora no tiene un foro donde mostrarse, luego de que la UNAM dejara de exhibirla en el Centro Universitario Tlatelolco—, el gobierno capitalino podría acogerla.
“Nada nos haría más felices que iniciar conversaciones con el señor Blaisten para ver la colección tenga un espacio en la ciudad, para nosotros sería un proyecto educativo y cultural. Tenemos interés y disposición para hacerlo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario